Excursión en Cortona – Eremo Le Chelle.
Tour combinado – a pie + coche.
Celdas (Eremo Le Chelle) – un monasterio franciscano fundado por el mismo Francisco de Asís en 1211, y todavía hoy un refugio para los hermanos de la orden capuchina. Este lugar es realmente único; en el valle más pintoresco, en una de las laderas con terrazas creadas artificialmente, se encuentran las celdas de piedra diseñadas para la verdadera comunión con el Señor. Los edificios están rodeados de pequeños jardines bellamente cuidados
El nombre de Celdas es anterior a la llegada de San Francisco a esta zona, quizás por las plataformas excavadas en la roca con primitivas cabañas de pastores. El primer edificio, una pequeña iglesia del Arcángel Miguel, se construyó presumiblemente durante la ocupación lombarda de Italia, en torno a la cual se formó más tarde el claustro monástico. Fue el primer refugio fundado por San Francisco, donde permaneció tras recibir los estigmas y donde se cree que dictó el Testamento, una de sus obras más importantes en la que describe experiencias espiritistas, poco antes de su muerte en mayo de 1226.
Ciento cincuenta años después de su muerte, Francisco de Asís sería nombrado santo por el papa Gregorio IX, y se construiría una basílica en el lugar de su sepultura; el monasterio de Cortona sería a su vez cedido a la orden franciscana.
Antonio Barberini, hermano del Papa Urbano VIII, sirvió aquí de 1594 a 1596 y dejó un puente llamado Puente Barberini para conmemorar su estancia.
Después de 1775, durante el período de prohibición casi total de las órdenes religiosas, el monasterio fue cerrado y en 1807, bajo Napoleón, fue puesto en venta.
Hoy en día, 6 hermanos de la orden de los Capuchinos viven aquí permanentemente, pasando tiempo en soledad y oración.
Un recorrido por las tres órdenes de San Francisco: Franciscanos, Clarisas, Terciarios.
La Iglesia de San Francisco es la primera iglesia franciscana construida en esta provincia después de la famosa Basílica de Asís, diseñada por el más íntimo amigo y colaborador del santo, Ilia Coppi. El mismo que, en 1230, escondió el cuerpo del Hermano Francisco en un sencillo ataúd entre las piedras bajo el altar mayor de la Basílica de Asís, construida especialmente según su diseño.
En la iglesia de Cortona, en el altar mayor, hay un relicario regalado por el Hermano Elías a su ciudad natal.
En la iglesia de Cortona, en el altar mayor, hay un relicario regalado por el Hermano Elías a su ciudad natal.












