Una de las provincias más cercanas a París, Picardía, se llama por algo «la tierra de los castillos». Por su variedad y elegancia arquitectónica, Picardía es comparable al Valle del Loira.
El más impresionante es el castillo de Chantilly. Al llegar en coche, le dejará sin aliento con una belleza difícil de imaginar. Rodeado de fosos y fuentes, el castillo es como una perla en un entorno de verdor….
Los castillos aparecieron en este lugar ya en el siglo XII. En el siglo XVI, la antigua fortaleza feudal fue comprada y reconstruida por el duque de Montmorency (el Connetable, es decir, el comandante supremo de los reyes franceses). Este conjunto arquitectónico se convierte en una de las joyas del Renacimiento francés. Dado que el propio Montmorency sirvió bajo siete reyes y que sus hijos se criaron junto a los príncipes herederos, no es de extrañar que muchos acontecimientos, historias y nombres estén relacionados con este castillo.
Por ejemplo, la historia de amor entre Enrique IV, de 54 años, y Carlota de Montmorency, de quince. Deseoso de observar la decencia, el rey casa a la muchacha con el tercer príncipe de Condé. Sin embargo, el obediente novio se convierte de repente en un marido insolente y se lleva a la joven esposa a Bélgica, donde están protegidos por el patrocinio del rey de España. Esto causa tanta ira en el rey que incluso se plantea iniciar hostilidades, pero pronto muere, asesinado por Ravagliak. El hijo del insolente pretendiente y de Carlota crece y se convierte en un famoso general. El Gran Condé gana todas las batallas para Francia y le asegura el primer puesto en la política europea. Su corte rivaliza con Versalles en esplendor, mecenazgo y elegancia. Entre los íntimos del príncipe están Boileau, Racine, Lafontaine, Madame de Savigny, Molière. Aquí se estrena «Tartufo». El Gran Condé encarga a Le Nôtre el trazado de uno de los primeros parques regulares de Francia. Son las fuentes de Chantilly las que Luis XIV tomará como modelo cuando construya Versalles.
Continuando con las tradiciones de su padre, el hijo del Gran Condé construye en el siglo XVIII. unas caballerizas que no tienen rival para el rey francés. Hoy siguen siendo las caballerizas más famosas de Francia. Aquí, además del hipódromo, hay un palacio-museo y una arena-escenario para espectáculos únicos, donde los actores principales son los caballos. ¿Ha visto alguna vez, por ejemplo, cómo bailan una chica y un caballo?
Cuando el último de los herederos de los Borbones fue asesinado por orden de Napoleón, su padre, ya anciano, legó Chantilly al duque Amal, su sobrino nieto y ahijado. Fue el duque quien creó la colección de pinturas y antigüedades, considerada en Francia la segunda en importancia después del Louvre….
En el castillo, restaurado por el duque Amal, los visitantes son recibidos por estatuillas antiguas de los siglos V-VI a.C., cuadros de Rafael, camafeos únicos, una impresionante colección de retratos de reyes y reinas de Francia, joyas, famosos libros medievales, la singular biblioteca del duque, la capilla con el entierro de Condé, suites inolvidables e interiores únicos….
Por cierto, en Chantilly por primera vez apareció la crema batida, que se llama así en Francia – crema de Chantilly …
