Excursión a la isla de Procida:
Procida es la más pequeña de las islas de la costa napolitana. Aquí no hay aglomeraciones de turistas, ni siquiera en verano, por lo que los amantes del silencio la encontrarán sin duda el destino vacacional perfecto. Procida se convirtió en Capital Italiana de la Cultura en 2022.
La isla fue colonizada por los griegos en la antigüedad. En el punto más alto de la isla, Terra Murata, el monasterio y la iglesia de Miguel Arcángel.
La ciudad de Procida, con sus estrechas calles empedradas, terrazas y diminutos balcones, está cautivando a turistas italianos y extranjeros por igual.
La isla de Procida ha sido escenario de largometrajes, entre ellos «Postino» (El cartero), sobre el exilio de Pablo Neruda.
Geográficamente, Procida pertenece a las islas Flegreas, frente a la antigua Cumas, frente al cabo Miseno. Su suelo tobáceo y su costa rocosa y escarpada atestiguan claramente sus orígenes volcánicos.
En contraste con sus homólogas, Capri e Ischia, Procida sigue siendo hoy un lugar relativamente poco conocido, con su propio encanto de calles tranquilas y casas antiguas con fachadas de colores.
La arquitectura de estilo mediterráneo, la densa vegetación, el mar cristalino y los pintorescos acantilados bañados por las olas crean el escenario perfecto para unas vacaciones realmente relajantes. Los ferries y barcos procedentes de Nápoles y Pozzuoli atracan en el puerto de Marina di Sancho Cattolico, también conocido como Marina Grande.
Las coloridas casas que bordean el mar son lo primero que se ve al acercarse a la isla.
El Castillo de Castello se alza sobre una roca de toba que domina el barrio de pescadores y el mar. Es la parte más alta de la isla, Terra Murata.
Caminar por las antiguas calles con patios y jardines es como viajar en el tiempo.
El castillo, los palacios y las iglesias han cambiado poco con el tiempo. El panorama desde el mirador es vertiginoso. Las casas de Marina di Corricella son particularmente elegantes, con ventanas y puertas que dan a escaleras de piedra: muy parecido a un decorado de teatro.
El lugar de baño más popular es Marina di Chiaiolella, una pintoresca bahía semicircular protegida por el promontorio de Santa Margherita Vecchia. Detrás comienza el paseo Cristóbal Colón, principal punto de encuentro de lugareños y turistas. A lo largo del mismo hay hoteles y restaurantes. Chiaiolella está conectada por un puente con la isla de Vivara, reserva protegida por el Fondo Mundial para la Naturaleza. Para llegar a ella, hay que obtener un permiso de la administración de Procida.
