El Monasterio de Santa Maria delle Grazie y la Última Cena de Leonardo da Vinci
Dos nombres inolvidables, para la historia de la civilización, están asociados a esta iglesia: Donato Bramante y Leonardo da Vinci. El ábside de la iglesia es un grandioso testimonio de la arquitectura espacial del periodo renacentista. En el mismo periodo, Leonardo pintó la Última Cena, su obra más grande, en la pared del refectorio de este monasterio con una técnica inusual de fresco, y sobre la superficie seca de la pared, utilizando un temple especial. Ha sido restaurada muchas veces. La última duró 20 años y no se terminó hasta 1998.
«La Última Cena» es un cuadro monumental de Leonardo da Vinci. Fue pintado entre 1495 y 1498. La imagen mide 4,6×8,8 metros. Representa el episodio bíblico de la Última Cena, la última comida de Jesucristo con los doce apóstoles. La pintura representa el momento en que Jesús pronunció las palabras que uno de sus discípulos le traicionaría.
El Monasterio de Santa Maria delle Grazie atrae sobre todo por los frescos de Leonardo da Vinci, pero tampoco se puede pasar por alto el monasterio en sí. La iglesia de Santa Maria delle Grazie no es sólo el fresco de la Última Cena. La iglesia en sí es una obra arquitectónica excepcional, comparable en importancia a los edificios más famosos de Milán. En la construcción de la iglesia participaron arquitectos de la talla de Pietro Solari y Donato Bramante (Basílica de San Pedro en Roma), grandes arquitectos italianos.
***Las entradas para la Última Cena son muy difíciles de comprar, para ello es necesario solicitarlas con antelación, en temporada alta – preferiblemente con uno o dos meses de antelación. Por regla general la entrada es a una hora determinada una vez al día, no podrá elegir la hora. Las visitas se realizan con un guía autorizado de habla inglesa, a veces sólo hay entradas sin guía, pero no siempre. Si desea que le acompañe un guía de habla rusa, deberá comprar también una entrada para él. La visita a la Última Cena dura estrictamente 15 minutos, después se le pedirá que se marche.












