Giuseppe Fortunino Francesco Verdi fue un famoso compositor italiano. La obra de Giuseppe está repleta de obras maestras que representan las grandes obras del género operístico. Gracias a sus composiciones, la ópera italiana del siglo XIX alcanzó su apogeo. El talento de Verdi le permitió crear veintiséis óperas completas, un réquiem y muchas piezas de viento. «Puedes quedarte con el mundo entero, pero déjame Italia» – Giuseppe Verdi.
El tour comienza en Parma – traslado en coche 40 kilómetros hasta Roncole Verdi, la pequeña ciudad donde nació Giuseppe Verdi. Aquí se encuentra la casa-museo donde nació el destacado compositor el 13 de octubre de 1813. Frente a la casa se encuentra la iglesia de San Miguel, donde Verdi fue bautizado y donde se puede ver el órgano en el que tocaba los domingos.
Más adelante se llega a Busseto, donde se visita el teatro construido por los habitantes del pueblo en honor a Verdi en 1868. Es una pequeña y encantadora ciudad en miniatura llamada Busseto. Así que Verdi -en su día- se trasladó aquí, a la casa de un mecenas, desde su pueblo natal. Hasta el día de hoy
Busseto trata a Verdi como si estuviera vivo y coleando. Después de todo, ¿qué otro habitante de la ciudad puede declarar con orgullo: «¡Nací cerca de la casa donde el futuro autor de ‘La Traviata’ aprendió a tocar el piano!»? La casa Barezzi, donde vivió y estudió el joven Verdi, es ahora un museo.
Si es posible, se puede visitar el museo Casa Barezzi en la antigua casa de Antonio Barezzi, suegro de Verdi.
El recorrido termina con una visita a la villa de Verdi, que el maestro construyó en el campo y donde vivió con su segunda esposa Giuseppina Strepponi desde 1851 a 1901 hasta su muerte. En la planta baja de la elegante casa, las habitaciones aparecen ante los visitantes tal y como eran hace 150 años: muebles y cuadros, libros en estanterías, memorias, cada pequeño detalle habla de Verdi y su genio. La villa está rodeada por un hermoso parque creado por el propio músico al estilo inglés.
El compositor diseñó la villa él mismo sin ayuda de arquitectos. La casa está dividida en dos mitades. Una contiene el dormitorio, el estudio y el piano del compositor, y las habitaciones de su segunda esposa, Giuseppina Strepponi. Es aquí donde conoceremos la historia de la vida y el amor de Verdi y, sin duda, intentaremos comprenderle o al menos unirnos al gran genio. La segunda mitad sigue habitada por sus descendientes, que conservan con esmero el aspecto original de la villa y el hermoso jardín.
